El inicio de 2025 trae buenas noticias para los trabajadores del sector de la seguridad privada, quienes recibirán su primera nómina del año con el ajuste correspondiente al nuevo salario mínimo. Este aumento, del 9,54 %, eleva los ingresos mensuales de quienes devengan el mínimo a 1’423.500 pesos, cifra que, al sumar el subsidio de transporte de 200.000 pesos, totaliza 1’623.500 pesos.
Los vigilantes que prestan servicios en comercios, conjuntos residenciales, industrias y otros sectores manifiestan su satisfacción ante este incremento, que representa un alivio económico para enfrentar los retos financieros del año.
Tarifas sector comercial:
Tarifas para los inmuebles y estratos 4, 5 y 6.: 9.14 SMLMV más un 10% de administración y supervisión:
Más dinero en el bolsillo, pero también el impacto de la inflación
Aunque el aumento del salario mínimo supera la inflación proyectada, que se estima en un 5,1 % para 2025, el costo de vida sigue siendo una preocupación para los trabajadores. El Índice de Precios al Consumidor (IPC) reflejará el incremento en los precios de bienes y servicios, lo que podría absorber parte del beneficio del ajuste salarial.
Aportes a salud y pensión: ¿cuánto destinarán los trabajadores?
Los aportes al Sistema General de Seguridad Social, obligatorios para los trabajadores formales, implican deducciones importantes del salario mensual:
Salud:
- El 12,5 % del salario debe destinarse a salud, dividido en:
- 8,5 % asumido por el empleador.
- 4 % descontado del salario del trabajador.
- Con el nuevo salario mínimo, el aporte del empleado será de 56.940 pesos mensuales.
Pensión:
- El 16 % del salario se destina a pensión, distribuido así:
- 12 % a cargo del empleador.
- 4 % asumido por el trabajador.
- En este caso, el trabajador deberá aportar otros 56.940 pesos mensuales.
El panorama para los vigilantes en 2025
El incremento salarial mejora las condiciones económicas de los vigilantes, un sector clave para la seguridad y el orden en diferentes entornos. No obstante, es crucial que los empleadores y trabajadores gestionen adecuadamente los aportes y consideren el impacto de la inflación para garantizar un equilibrio en sus finanzas personales y empresariales.
La primera nómina del año marca un punto de partida positivo, pero también recuerda los desafíos económicos que enfrentará Colombia en 2025.
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