Masacre en La Rompida: Violencia sin tregua en el Magdalena Medio Antioqueño

En un nuevo episodio de violencia que enluta a la región, cuatro personas perdieron la vida en la vereda La Rompida, municipio de Yondó, Magdalena Medio antioqueño. El fatídico incidente ocurrió cuando un grupo armado interceptó y atacó a los ocupantes de un vehículo que transitaba por la zona rural, limítrofe con el sur del departamento de Bolívar.

Según el brigadier (r) Luis Martínez, secretario de Seguridad de Antioquia, las primeras investigaciones sugieren la posible implicación de grupos como el Eln, las disidencias de las Farc y el Clan del Golfo. Estos grupos delictivos disputan acérrimamente el control de rentas criminales como la minería ilegal y el narcotráfico en la región.

El móvil del ataque parece estar relacionado con estas disputas territoriales, aunque aún no se han identificado formalmente a los autores materiales del crimen. Testimonios recogidos indican que los agresores bloquearon la vía y abrieron fuego contra los ocupantes del vehículo en el sector de La Rompida.

Las víctimas, trágicamente, incluyen a destacados miembros de la comunidad local. Yonathan Pérez Hueso, presidente de la junta de acción comunal de la vereda Lejanías de Cantagallo, junto con la secretaria Patricia Sepúlveda y el vicepresidente Lisímaco Zamudio, fueron algunas de las personas asesinadas. Eduardo Pérez también perdió la vida en este brutal ataque. Además, se reporta la muerte de un presunto integrante del Clan del Golfo, cuya identidad aún no ha sido confirmada.

El gobernador de Antioquia, Andrés Julián Rendón, ha anunciado medidas urgentes frente a este acto de barbarie. Desde la zona de los hechos, Rendón convocó una reunión extraordinaria con las autoridades de seguridad para coordinar esfuerzos y ofreció una recompensa de hasta 500 millones de pesos para quien brinde información que conduzca a capturar a los responsables.

Los cuerpos de las víctimas serán trasladados a Medicina Legal mientras la comunidad y las autoridades locales intentan comprender y responder a este nuevo golpe de la violencia que sigue azotando implacablemente la región del Magdalena Medio antioqueño.