¡Se
necesitan reclutadores!
No hay
un aviso formal como tal.
Por
ahora, el llamado está dirigido a quienes deseen cooperar con la búsqueda de
personas que apoyen la creación y aprobación de una ley de ajuste venezolano
(LAV) que, al igual que a los cubanos, le permita obtener la residencia y
eventual nacionalidad en Estados Unidos.
La ONG
My Voice Counts, Comunidad Venezuela, impulsa ante el Congreso de EEUU este
proyecto de ley, pero para ello se trazó la meta de conseguir 500,000 firmas de
respaldo, y necesita firmantes.
Dato1: En
1966, el Poder Legislativo de EEUU sancionó la Ley de Ajuste Cubano, que
facilitó a los desplazados por el castrocomunismo tener la residencia
permanente.
En
1996, se aprobó la norma “Pie secos, pies mojados” a favor de los cubanos que
venían por mar a EEUU, y la figura de Parole a médicos antillanos. Esa política
fue eliminada en 2017. La comunidad cubana es el III grupo de habitantes
de origen hispano en EEUU.
La
figura de reclutadores es llamada “embajadores”, por Mildred Rodríguez,
directora ejecutiva de My Voice Counts, y es el segundo paso en esta iniciativa
pro-estatus migratorio al éxodo de más de 500,000 venezolanos que están en
Estados Unidos.
La ONG
surgió en 2014 en Orlando, pero tiene presencia en Houston y Miami. Su objetivo
es la integración del venezolano a la cultura americana.
El
proyecto de ley de ajuste está en la página Leydeajustevenezolano.org y
en Instagram, para quienes deseen respaldarlo.
Los
requisitos de los firmantes: Ser mayores de 18 años, no importa si no son
venezolanos.
Desde noviembre de 2021, están más activos, tras la búsqueda de embajadores; y han hecho lobby con los legisladores de EEUU, Rick Scott, María Elvira Salazar, Mario Díaz Barart y Darem Soto.
En el primer trimestre de 2022, mantendrán esa línea de trabajo y le plantearán a las personas que quieran participan, no sólo que ingrese a la página para estar al informados, sino otras tareas: 1) Que llamen y envíen correos a los legisladores; 2) Que firmen una carta modelo que pueden bajar de la página; 3) Que den un aporte al proyecto pues cada acto tiene un valor financiero, como ir a Washington, sacar copias o mantener activa la web; y 4) Darle difusión al proyecto en las redes sociales o locales de trabajo.
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