La depuración del censo electoral que llevó a cancelar 42 mil cédulas a colombo-venezolanos

A muchos ciudadanos venezolanos que habían tramitado su cédula por ser hijos de padres y madres colombianas, la Registraduría les canceló el documento alegando supuestas «irregularidades». Afectaron desde migrantes en ventas informales hasta médicos, empresarios y más.

Hoy día, miles de ciudadanos venezolanos que habían logrado su cédula como colombo-venezolanos, están indocumentados sin poder seguir con sus emprendimientos, sus contratos laborales, ni sus estudios, esto luego de que la Registraduría Nacional les cancelara esas cédulas por supuesta irregularidades.

Según la entidad, esto se dio tras una evaluación y depuración del censo electoral en Colombia.

Mientras el  Gobierno de Iván Duque ha apostado durante su mandato por la regularización de 1,7 millones de venezolanos en Colombia con el estatuto temporal de protección, que está manejando Migración, pasa esta cancelación masiva de cédulas.

Sin embargo, las denuncias por cédulas colombo-venezolanas con irregularidades no son nuevas.

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El País de España conoció historias de migrantes hoy día, afectados por esta decisión.

A Yessica Godoy por ejemplo, la detuvieron en el aeropuerto El Dorado, de Bogotá, cuando iba a un paseo familiar en España. Había tramitado permisos y comprado pasajes con su cédula colombo-venezolana.

El 24 de enero cuando ya estaba en el aeropuerto, le notificaron que el documento estaba cancelado.

Lo mismo le pasó a Gabriela Arenas, directora de la fundación Taller de Aprendizaje para las Artes y el pensamiento (TAAP).

Una vez a ella le notificación la cancelación del documento, se puso a averiguar y ha conocido más de 5000 casos «en los que se trata de errores procedimentales y administrativos”.

Errores, recoge El País de España, «cometidos en las registradurías, números de seriales incorrectos o falta de número de folio, temas así”.

Han reportado casos en Bogotá, Cali, Medellín, Pasto, Bucaramanga, Santa Marta, Barranquilla y varias ciudades más.

En la depuració que hizo la Registraduría, también sacó del censo y registros, 290.000 muertos.

Muertos en el registro

«Tenemos hasta el mes de enero para hacer la última verificación, pero ya estamos encontrando los fallecidos, nos faltan unas notarías, pero vamos a encontrar todos los muertos que estaban en el censo electoral», indicó el registrado Alexander Vega.

Y recordó que las familias deben reportar a la Registraduría el deceso de sus seres queridos.

En este caso, hay aún miles de muertos que aparecen activos en centros de votación, porque «no es otra cosa que la omisión de los familiares que no registraban la defunción”.

 




 


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